sábado, 8 de noviembre de 2014

Parte, corre tu aventura...

¿Cuántas veces correrás hasta perder el aliento?
¿Cuántas veces esquivarán los huecos de tus dedos
la espuma de olas rugientes?
¿Cuántas veces te deleitarás con la sensación
de alzar un pie al vacío, y decir:
"aquí estoy, corriendo el riesgo;
aquí decido quedarme"?

¿Te partirás el alma cien veces?
¿Renacerás ciento una?
¿Te atreverás a perseguir tus sueños,
serás un cometa incandescente?
¿O te quedarás ahí abajo,
viendo el tiempo pasar?

Que no te de miedo partir en busca de aventuras;
ya lo hicieron otros antes.
La misma tierra que habitas la poblaron en antaño
piratas con polvo en los dientes
y sudor pegajoso en sus camisas
poetas con dedos sucios
y pelo impoluto
guerreras con valentía ardiente
plateada, refulgente.

En esta misma tierra,
mientras estás ahí sentada.

Que no te ciegue la modernidad
eres tan humana
como la primera persona que alzó la vista al cielo
en una noche de verano
y se quedó maravillada por la luna.

Los mismos miedos, los mismos anhelos.
Los mismos sueños y esperanzas.
Parte, corre tu aventura.
Y quizá, en un futuro muy lejano,
en miles de años,

alguien se acordará de ti
y te agradecerá, haber corrido el riesgo.

Y leerá tus historias,
y soñará por las noches.
Heroína de tiempos lejanos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario